Ansiedad y Arte

                                                   

                                         

 Recientemente se está hablando mucho más de la ansiedad y la depresión debido a los problemas mentales surgidos tras la pandemia, pero antes de ésta ya éramos much@s l@s que la sufríamos.

En mi caso des de que me marché a estudiar fuera.

No pretendo contar mis problemas ni la odisea que pasé durante una etapa, además de los síntomas físicos, los cuales no se quedan en ahogos faltas de aire etc sino que hay mucho, mucho más, lo peor para mí fue y sigue siendo la aceptación social y el no sentirte cómo el resto de gente que te rodea.

Somos vist@s como vagos o qué nosotros creamos el problema y lo podemos solucionar pero no queremos hacerlo ya que estamos más cómodos así.

Ya sé que he dicho que no iba a contar mis innumerables dolores, síntomas o situaciones por las que he pasado pero si lo hago de forma resumida es sobre todo para argumentar este último párrafo.

Recuerdo que me pasaba meses sin poder tragar por el dolor de garganta que tenía hace unos 15 años fue el primer síntoma importante a parte de las taquicardias, mareos sudores pero aún así hacía vida más o menos normal.

Más tarde le llegó al estómago me recorrí todo tipo de especialistas sin casi mejoras, pero seguía, ahí ,me encontraba acabando la carrera de historia del arte, haciendo el último curso de Restauración de mueble y ya había acabado la de Restauración de pimtura y escultura además de hacer el cap.

Ahora con distancia veo que era muy valiente por seguir.

LLegué a Denia, dejé valencia y empecé a opositar para el cuerpo de profesores de secundaria, además de compartirlo con acompañar a mi madre a las quimios y radios, y dar clases en una academia.

Tenía dolores horribles de estómago, no dormía, temblaba, lloraba pero seguía.

Me llegué a enfrentar a las tres pruebas de oposiciones en Zaragoza, Barcelona y Valencia, exponiendo los temas al tribunal con flojedad en las piernas, acabando de vomitar e incluso con visión borrosa y pérdida por momentos de visión en un ojo y seguía seguía.

Nos trasladamos a vivir a Valencia, mi hija tenía un mes y empezaron las pérdidas de visión y yo ahí sola, pero lo superamos. 

Volvimos a Denia llegaron los dolores de cadera que me impedían levantarme de la cama y la culpabilidad de no poder ser la mejor madre como yo quería.

Actualmente he pasado una fase de contracciones esofáguicas en las que en menos de un mes perdí 15 kilos.

Entonces llego hasta aquí pensando que no he podido solucionarlo y la vida ha ido pasando, especialistas, terapias, terapeutas y médicos que son amigos y muchas experiencias y proyectos que se quedaron en el camino y no sólo profesionales y ver cómo he hecho sufrir a los míos o como algunos que creía que eran los míos me han defraudado quizá porque yo les defraudé primero no sé. 

Y todo esto para qué ha servido pues pensando hoy cuándo no podía más con la vida pensé y porqué no puedo ayudar a alguien con esto y pensé en mi tesis cuya hipótesis intenta demostrar cómo el arte puede ayudar a las personas y en cómo me ha ayudado a mi y que para mí unas de las funciones del arte es la función social, entre ellas, las de expresar y crear con un fin terapeútico.

Otra de mis pasiones y profesiones es la restauración el arreglar un mueble o una pintura o cualquier objetó.

Desde niña solía al ver las cosas rotas el cómo necesitar arreglarlas.

Siempre he escondido que tengo ansiedad generalizada per desde hace un tiempo creo que una manera de ayudarnos es hacerlo visible y no avergonzarse de ello. Como una reinvidicación que busca comprensión y un homenaje a todas aquellas personas que sintiendo lo que sienten continúan su vida cuando piensan ¿C

ómo puede seguir la vida con todo el dolor que llevo en mi interior?

No sé a dónde llevará esto ni para qué todo esto que he escrito ni que pensará de mi la gente que lo lea (si es que alguien lo leerá)

Gracias